La Comisión de Mercado Interior del Parlamento Europeo ha aprobado un proyecto de directiva por el que establece que las empresas que prestan servicios esenciales en sectores como la energía, transportes y sanidad, entre otros, adopten las medidas necesarias para mejorar la capacidad de resistencia ante posibles ataques cibernéticos. Además, prevé la creación de un grupo de coordinación estratégica entre los distintos Estados miembros de la UE y con la colaboración de la Agencia Europea de Seguridad de las redes y de la información (ENISA) para el intercambio de información y la capacidad de respuesta, así como la adopción por parte de cada Estado miembro de una red de Equipos de Respuesta a Incidentes de Seguridad Informática y una estrategia de ciberseguridad.