The Global Risks Report 2024 
12 de enero 2024

El Foro Económico Mundial acaba de publicar el Informe de Riesgos Globales 2024 (The Global Risks Report 2024), que, con periodicidad anual, analiza los principales riesgos a nivel internacional.

Por “riesgo global” se entiende la posibilidad de ocurrencia de un acontecimiento o condición que, en caso de producirse, afectaría negativamente a una proporción significativa del producto interior bruto, la población o los recursos naturales. Bajo esta definición se agrupan 34 factores de índole político, social, económico, tecnológico y medioambiental.

Al igual que su edición anterior, que fue elaborado con una metodología renovada, el Informe de Riesgos Globales 2024 articula de nuevo un estudio para el corto plazo (dos años) y el largo plazo (con horizonte de diez años). En el corto plazo, los cinco riesgos globales que muestran una mayor severidad este año son la desinformación, los episodios de meteorología extrema, la polarización social, la vulnerabilidad del ciberespacio y los conflictos armados entre Estados.

Por otra parte, en el largo plazo (10 años), el ranking muestra en los primeros puestos riesgos globales de índole predominantemente medioambiental, como son los episodios de meteorología extrema, los cambios críticos a los sistemas del planeta, el colapso de la biodiversidad y los ecosistemas, y la escasez de los recursos naturales. En esta clasificación, la desinformación aparece en quinta posición.
 
 
Otro parámetro que ofrece el informe es una comparación entre ambos horizontes temporales. Estos datos señalan una percepción pesimista de la evolución del contexto internacional. En concreto, en el corto plazo (dos años), el 30% de los participantes en la encuesta consideran que los riesgos son especialmente acuciantes y turbulentos. Sin embargo, en el medio plazo, el 63% considera esta misma clasificación.
 

Por otro lado, la información falsa es una de las mayores preocupaciones en la actualidad. De hecho, este riesgo ocupe el primer puesto en el ranking del informe de riesgos globales. Esta cuestión cobra especial interés a la vista del calendario previsto de celebración de elecciones en los próximos dos años. Tal y como indica el informe, cerca de tres mil millones de personas acudirán a las urnas en varias economías; entre ellas, la propia Unión Europea y Estados Unidos en 2024. En estos procesos electorales democráticos, la posibilidad de la presencia de la desinformación podría cuestionar su propia legitimidad.

Además, los recientes avances tecnológicos han aumentado el volumen, el alcance y la eficacia de la información falsificada, con flujos más difíciles de rastrear, atribuir y controlar. En la actualidad, la tecnología permite elaborar vídeos falsos, con declaraciones inventadas de dirigentes políticos (Deep fake), así como su propagación por redes sociales de forma segmentada. Este tipo de acciones plantean serios retos.
  Por otra parte, resulta significativa la entrada, entre los cinco primeros puestos, de los conflictos armados. En particular, la invasión ilegal de Ucrania, que comenzó en febrero de 2022, es un escenario de alta preocupación que inyecta elevados niveles de incertidumbre en plena Europa. Además, se le añade la espiral de violencia en la franja de Gaza entre Israel y Hamás, con serio riesgo de convertirse en un conflicto regional. La extensión al mar Rojo y los ataques en una de las principales rutas de tráfico marítimo en Bab el Mandeb son ejemplo de estas manifestaciones, con serias consecuencias para la economía mundial.

Con todo, los resultados del informe plasman, en su conjunto, un escenario global inestable, que apunta a una evolución poco alentadora en las cuatro tendencias globales de transformación identificadas en la Estrategia de Seguridad Nacional 2021: la crisis climática, la incertidumbre económica, la mayor competición geopolítica, y la aceleración del cambio impuesto por la tecnología.