Tras conversación telefónica entre presidentes de EE.UU. y Rusia, se acordó avanzar hacia una solución pacífica mediante cese bilateral de hostilidades contra infraestructuras energéticas por un periodo de 30 días. Además, las partes aceptaron iniciar negociaciones técnicas sobre implementación de un alto el fuego en el mar Negro y el intercambio de 350 prisioneros (175 rusos por otros 175 ucranianos), así como el traslado de 23 militares ucranianos gravemente heridos. Por su parte, presidente ruso añadió que cualquier solución debe tener en cuenta necesidad de eliminar causas profundas de la crisis y garantizar sus intereses legítimos en ámbito de seguridad. Sobre iniciativa estadounidense de establecer una tregua de 30 días, reiteró que se precisa concretar todavía varios detalles como control efectivo del posible alto el fuego y necesidad de detener la movilización y rearme en Ucrania. Por último, enfatizó que la condición para prevenir una escalada es el cese total de la asistencia militar extranjera y el suministro de información de inteligencia a Ucrania. En respuesta, presidente de Ucrania destacó que su homólogo ruso había rechazado propuesta de alto el fuego total y, en consecuencia, pidió a comunidad internacional le imponga sanciones y continúe prestando asistencia a su país. Además, denunció que durante la noche continuaron los ataques rusos sobre diversas regiones ucranianas y señaló que una verdadera muestra de querer poner fin a esta guerra sería un cese real de los ataques contra la infraestructura civil, lo que podría acerca una solución pacífica. Por otra parte, Gobiernos de Polonia, Lituania, Letonia y Estonia recomendaron retirarse de la Convención sobre la Prohibición de las Minas Antipersonal con fin de fortalecer defensa de sus fronteras y su capacidad de disuasión ante amenaza rusa y bielorrusa. Fuente: Gobiernos Ucrania, EE.UU., Rusia y Polonia