Ministros de Exteriores del G7, además de abordar situación en Oriente Próximo y Ucrania, pidieron aumentar seguridad y resiliencia en el Indopacífico y se opusieron a intentos unilaterales de alterar el statu quo en el Mar de China Oriental y Meridional. Asimismo, mostraron su preocupación por desarrollo militar y nuclear de China, así como por sus prácticas no comerciales y exigieron a Corea del Norte abandone sus armas nucleares y programas de misiles balísticos. Por otra parte, denunciaron violencia de pandillas en Haití y respaldaron restauración de la democracia en Venezuela. Además, condenaron represión de manifestantes en este país y sus amenazas a buques de Guyana. Respecto a África, denunciaron combates en Sudán y la ofensiva del M23, respaldada por Ruanda, en República Democrática del Congo. Finalmente, apoyaron fortalecimiento de sanciones y la lucha contra la guerra híbrida y el sabotaje. Durante la reunión, se adoptó una declaración sobre seguridad y prosperidad marítima destacando crecientes riesgos en este ámbito, como son disputas estratégicas, actividades marítimas ilícitas y  amenazas a libertad de navegación y sobrevuelo. Entre otros aspectos, se hizo mención a necesidad de protección de infraestructuras marítimas y cadenas de suministro. Fuente: G7