21 de marzo 2017
La Unión Europea avanza paso a paso en materia de seguridad. En el último año, la seguridad europea ha estado presente en la agenda de las instituciones europeas, como uno de los ámbitos en los que el debate acerca de una mayor construcción del proyecto europeo a través de pasos integradores está más presente.
Son tres las principales líneas de acción que desarrollan esta visión europeísta de la seguridad: el Plan de Implementación de la Estrategia Global de Política Exterior y de Seguridad de la UE, liderado por el Consejo Europeo; el Plan de Acción Europeo de Defensa, aprobado por la Comisión; y la cooperación entre la Unión Europea y la OTAN, que tiene su origen en la cumbre de 2016 de la Alianza de Varsovia.
Plan de Implementación de la Estrategia Global de Política Exterior
En el último año, la presentación de la Estrategia Global de Política Exterior y de Seguridad de la UE, el pasado 24 de junio de 2016, marca un punto relevante por cuanto en el documento se reconoce la necesidad de una Europa más fuerte, más creíble y con mayor capacidad de respuesta mediante la aplicación, entre otros principios, de un enfoque pluridimensional mediante la utilización de todos los instrumentos y políticas disponibles orientados a la prevención, la gestión y la resolución de conflictos.
El Plan de Implementación de la Estrategia, adoptado el 14 de noviembre de 2016 establece un nivel de ambición para la política exterior y la seguridad europea que parte de las tres prioridades identificadas en la Estrategia Global:
- Ser capaces de responder de forma rápida y decisiva al amplio espectro de las tareas de gestión de crisis contempladas en el artículo 43 del Tratado de la Unión Europea.[1]
- Fortalecer la capacidad de la Política Común de Seguridad y Defensa (PCSD) para contribuir de forma más sistemática a la resiliencia y estabilización de terceros países en vías de recuperación o amenazadas o por conflictos o fuentes de inestabilidad.
- Proteger a la Unión y sus ciudadanos mediante medidas concretas que hagan frente a los retos y desafíos en todo el nexo que relaciona la seguridad exterior con la interior de la Unión
El pasado viernes, 10 de marzo de 2017, el Consejo Europeo aprobó varias medidas relevantes en materia de seguridad, y que pueden concebirse como un paso más en la materialización progresiva del Plan de Implementación de la Estrategia.
La primera de las iniciativas es el establecimiento de una Capacidad de Planeamiento Operativo y Conducción Militar. Se trata de un nuevo Cuartel General a nivel operacional, constituido por un núcleo de aproximadamente treinta personas que dependerá del Military Staff del Servicio de Acción Exterior de la Unión Europea para la planificación y conducción de misiones militares no ejecutivas.
El Director General del Estado Mayor de la UE será el Director de este nuevo Cuartel General operacional y asumirá el mando de las misiones militares no ejecutivas de la PCSD (en la actualidad, las misiones de formación militar de la UE en Somalia, en África central y en Malí) bajo el control político y la orientación estratégica del Comité Político y de Seguridad, que está integrado por embajadores de los Estados miembros de la UE y tiene su sede en Bruselas.
La Capacidad de Planeamiento Operativo y Conducción Militar trabajará en estrecha colaboración con su contraparte civil existente, la Capacidad de Planificación y Conducta Civil a través de una célula de coordinación de apoyo conjunto.
Esta célula podrá compartir experiencias, conocimientos y prácticas óptimas sobre cuestiones pertinentes tanto para las misiones militares como civiles, así como para las capacidades cuando las misiones civiles y militares se desplieguen simultáneamente en la misma zona, incluido el apoyo médico o las medidas de protección.
Otras medidas de avance en materia de seguridad, abordadas el pasado 9 y 10 de marzo del 2016, son las siguientes:
- La posibilidad de una cooperación estructurada permanente (PESCO). En el Tratado de Lisboa se prevé que un grupo de Estados miembros de la UE pueda reforzar su cooperación en materia militar. La creación de un sistema de cooperación estructurado permanente, inclusivo y modular, permitiría a los Estados miembros colaborar más en el ámbito de la seguridad y la defensa sobre una base voluntaria.
- La posibilidad de una revisión anual coordinada por los Estados miembros de la UE sobre la defensa (CARD), que establecería un proceso para obtener una mejor visión a nivel de la UE de cuestiones como el gasto en defensa y la inversión nacional, así como los esfuerzos de investigación en materia de defensa. Al aportar una mayor transparencia y visibilidad política a las capacidades de defensa europeas, una CARD permitiría una mejor identificación de las deficiencias y permitiría abordarlas mediante una cooperación más profunda en materia de defensa, así como un planteamiento mejor y más coherente de la planificación del gasto en defensa.
- El trabajo en curso en otros ámbitos, como el fortalecimiento de la toolbox de respuesta rápida de la UE, incluidos los battlegroups de la UE y las capacidades civiles, la creación de capacidad en apoyo de la seguridad y el desarrollo.
Plan de Acción Europeo de Defensa
En el marco del Plan Europeo de Acción de Defensa, documento de la Comisión Europea, se propone un conjunto de medidas que están orientadas a promover la industria de defensa y la I+d+i europea. Entre las iniciativas que este Plan contempla, cabe destacar el establecimiento de un Fondo Europeo de Defensa y otras acciones para apoyar el gasto más eficiente de los Estados miembros en capacidades de defensa conjunta, reforzar la seguridad de los ciudadanos europeos y fomentar una base industrial competitiva e innovadora como base para alcanzar una autonomía estratégica de la Unión. El Fondo Europeo de Defensa está concebido para apoyar las inversiones en investigación conjunta y en el desarrollo conjunto de equipos y tecnologías de defensa mediante la inclusión de dos "ventanas" complementarias, pero diferentes en su estructura jurídica y en su presupuesto:
- Una "ventana de investigación" para financiar la investigación en colaboración en tecnologías innovadoras de defensa tales como electrónica, el software cifrado o robótica. La Comisión ya ha propuesto 25 millones de euros para la investigación en defensa como parte del presupuesto de la UE para 2017 y espera que esta asignación presupuestaria alcance 90 millones de euros hasta 2020. En el marco financiero plurianual de la UE después de 2020, Para proponer un programa de investigación dedicado a la defensa con un importe estimado de 500 millones de euros al año.
- Una "ventana de capacidades" que actuaría como una herramienta financiera que permitiría a los Estados miembros participantes comprar juntos ciertos activos para reducir sus costes. Las capacidades serían acordadas por los Estados miembros, que poseerían la tecnología y el equipo. Por ejemplo, los Estados miembros pueden invertir conjuntamente en tecnología de aviones no tripulados o comprar helicópteros a granel para reducir costes. Por orden de magnitud, esta ventana debería poder movilizar alrededor de 5 000 millones de euros al año. La Comisión lanzará un estudio de alcance para refinar esta estimación.
Otras medidas contempladas en el Plan Europeo de Acción de Defensa son el fomento de las inversiones en pequeñas y medianas empresas a través de apoyo financiero del Fondo Europeo de Fondos Estructurales y de Inversiones y el Banco Europeo de Inversiones (BEI), y el fortalecimiento del mercado único para la defensa, un mercado abierto y competitivo en Europa para ayudar a las empresas a trabajar a través de las fronteras y ayudar a los Estados miembros a obtener la mejor relación calidad-precio en sus compras de defensa.
Cooperación entre la Unión Europea y la OTAN
La implementación del conjunto de cuarenta propuestas que la Declaración conjunta UE-OTAN contempla, firmada en julio de 2016 en la cumbre OTAN de Varsovia, fue formalmente adoptada en el Consejo Europeo del pasado 6 de diciembre de 2016.
Estas cuarenta medidas son de aplicación en siete ámbitos de actuación: migración irregular; cooperación operativa, incluyendo asuntos de seguridad marítima; ciberseguridad; capacidades de defensa; industria de defensa e investigación entre las que figuran entre la EU NAVFOR MED Sophia y la Operación Sea Guardian en el Mediterráneo; adiestramiento y apoyo a los esfuerzos de creación de capacidades.
La aplicación de la declaración conjunta es una prioridad política clave para la UE. Constituye un elemento esencial de los esfuerzos más amplios encaminados a reforzar la capacidad de la Unión para actuar como proveedor de seguridad, de conformidad con las conclusiones del Consejo sobre la aplicación de la Estrategia Global de la política exterior y la seguridad de la UE.
Fuente: Unión Europea
[1] Artículo 43: Las misiones contempladas en el apartado 1 del artículo 42, en las que la Unión podrá recurrir a medios civiles y militares, abarcarán las actuaciones conjuntas en materia de desarme, las misiones humanitarias y de rescate, las misiones de asesoramiento y asistencia en cuestiones militares, las misiones de prevención de conflictos y de mantenimiento de la paz, las misiones en las que intervengan fuerzas de combate para la gestión de crisis, incluidas las misiones de restablecimiento de la paz y las operaciones de estabilización al término de los conflictos. Todas estas misiones podrán contribuir a la lucha contra el terrorismo, entre otras cosas mediante el apoyo prestado a terceros países para combatirlo en su territorio.