Durante los días 8 y 9 de noviembre de 2017 ha tenido lugar en Bruselas una nueva reunión de los Ministros de Defensa de los países de la OTAN. El objetivo principal de la reunión era continuar con la adopción de medidas para la eficaz adaptación de la Alianza Atlántica a las nuevas amenazas del siglo XXI, consecuencia de las decisiones adoptadas en la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno celebrada en Varsovia[1] en julio de 2016.
La reunión estuvo centrada en tres temas principales: Revisión de la Estructura de Mando de la Alianza, Afganistán y Corea del norte. Además, al margen de la reunión ministerial, el Secretario de Estado de Defensa de Estados Unidos presidió una reunión sobre la Coalición Internacional Inherent Resolve para luchar contra DAESH.
Revisión de la Estructura de Mando de la Alianza
Durante la reunión se presentaron las bases para una revisión de la estructura de mando aliado, con la doble finalidad de asegurar la eficacia de las medidas de disuasión y defensa en el área euroatlántica y de proyectar estabilidad en el exterior. En principio, dicha revisión incluirá un nuevo mando aliado para proteger las líneas marítimas de comunicación entre Europa y América del Norte y otro para mejorar el movimiento de tropas en Europa.
En relación al movimiento de tropas, se señaló la necesidad de acometer reformas en infraestructuras civiles, principalmente redes de carreteras y ferroviarias que permitan el rápido despliegue de carros de combate y equipo pesado, para lo cual se requerirá una eficaz coordinación de la Alianza Atlántica no sólo con los gobiernos nacionales sino también con la Unión Europea y el sector privado.
Por lo que respecta a los ataques cibernéticos, el Secretario General señaló que son una amenaza creciente para la seguridad de los aliados y que la mencionada revisión de la estructura de mando de la OTAN posibilitará que la Alianza pueda responder a las amenazas cibernéticas con mayor eficacia.
Corea del Norte
El Secretario General recordó que los programas de misiles balísticos y nucleares de Corea del Norte representan una seria amenaza para los países miembros de la OTAN, sus aliados y para el régimen internacional de no proliferación, remarcando que la Alianza Atlántica tiene las capacidades necesarias y la voluntad de responder a cualquier agresión.
Afganistán
En relación a Afganistán se debatieron los compromisos asumidos por los aliados y los países socios para incrementar su participación a la Misión Resolute Support de adiestramiento y asesoramiento de las fuerzas de seguridad afganas. A esta sesión se unió el Ministro de Defensa Interino de Afganistán que informó sobre la situación de seguridad y los progresos que está haciendo su gobierno en las reformas esenciales del estado afgano.
En este sentido, se acordó mantener al menos hasta 2020 la Misión Resolute Support, con un incremento de unos 3.000 efectivos, por lo que el contingente de la misión alcanzará los 16.000 los militares. Por su parte, España anunció el aumento de su contingente en unos 30 militares para el adiestramiento de capacidades concretas, principalmente de unidades de operaciones especiales.
Participación de España
Durante el desarrollo de la reunión, la Ministra de Defensa de España realizó las siguientes propuestas:
- Mantener y mejorar la utilidad y entidad del CAOC (Centro de Operaciones Aéreas Combinadas) de Torrejón, dentro de la importante reorganización que se va a producir en la estructura interna de OTAN.
- Seguir avanzando en la modernización de la OTAN con una visión equilibrada que focalice su atención, tanto en la disuasión y defensa cómo en la proyección de estabilidad de nuestro entorno, de manera que las principales misiones que estén relacionadas con el flanco sur sean objeto de un trato paralelo y coherente que pueda plasmarse en el futuro en una estrategia combinada para el sur.
Finalmente, destacó la calidad y cantidad de la aportación de la Armada española a la OTAN, resaltando como España ha coordinado con éxito un grupo de diez naciones para poner sobre la mesa la necesidad de dar un seguimiento estratégico al Mediterráneo.
[1] En la Cumbre de Varsovia, la OTAN decidió continuar su proceso de potenciación y refuerzo de la defensa colectiva, ampliar su concepto de Disuasión para incluir a los actores no estatales y sumar un segundo pilar denominado “Proyección de Estabilidad” para aunar y dar coherencia a los distintos esfuerzos que la OTAN realiza fuera de sus fronteras en tareas de prevención de conflictos y estabilización.
Además, se aprobó el Marco de Adaptación a las amenazas emergentes del Sur, que consiste en un conjunto de medidas agrupadas en torno a tres ejes: mejora del conocimiento estratégico, preparación para llevar a cabo operaciones en la región si fuera necesario, y actividades relacionadas con la cooperación de países socios.
Finalmente, se acordó potenciar la cooperación con la UE mediante una declaración institucional entre ambas organizaciones, identificando áreas de colaboración como el desarrollo de unas capacidades de defensa coherentes, complementarias e interoperables; la Ciberseguridad; la seguridad marítima, la realización de ejercicios conjuntos de gestión de crisis; y la seguridad cooperativa con socios para el desarrollo de sus capacidades de defensa.