Seguridad Nacional y Política Marítima Integrada
20 de diciembre 2023
La Estrategia de Seguridad Nacional de 2021 recoge la vulnerabilidad del espacio marítimo como uno de los riesgos y amenazas para nuestra seguridad. España es un país con una clara condición marítima y, además, es esencial mantener la seguridad de las infraestructuras críticas situadas en el litoral y en la mar, garantizar el buen funcionamiento de nuestros puertos y de las tuberías y cables que llegan a nuestro país. Además, la seguridad marítima es esencial para garantizar el suministro a nivel internacional, que tiene una especial trascendencia en nuestra vida cotidiana.
Por otro lado, aproximadamente el 40% de la población española reside en los casi 8.000 km de nuestra costa. Entre las actividades que se desarrollan en la mar, se encuentran algunas tan importantes para nuestra economía como el comercio marítimo —se gestionaron 139.000 buques en 2021—, la pesca —la flota pesquera española es la tercera de la UE— o el turismo — que representa el 8% del PIB de España y un alto porcentaje se produce en la costa—. Obviamente, parte de las actividades desarrolladas en la mar afectan a terceros países, ya sea por compartir intereses o fronteras marítimas, lo que hace que el espacio marítimo sea considerado un «global common» o área de interés global.
Consciente de la importancia de la gestión de este espacio para toda la Unión, en 2007, la Comisión de la UE presentó el «libro verde» titulado «Hacia una futura política marítima de la Unión: perspectiva europea de los océanos y los mares». Este documento supuso el primer paso de la futura política marítima integrada, que, desde entonces, se ha desarrollado de forma progresiva. Esta propuesta europea pretendía ser la base para la gestión de los mares y océanos que permitiese el desarrollo de todas las actividades realizadas en torno a la mar de una forma equilibrada y sostenible.
Política Marítima Integrada UE
La Política Marítima Integrada (PMI) de la UE trata de armonizar todas las políticas comunitarias relacionadas con la mar. De esta forma, la Unión pretende obtener el máximo rendimiento de la explotación de su espacio marítimo, preservando el medio ambiente y logrando su desarrollo sostenible. Así, la UE favorece las futuras sinergias entre sus políticas, al tiempo que se refuerza la llamada «economía azul», que comprende todas las actividades económicas relacionadas con la mar.
Con anterioridad a esta incitativa, el sector marítimo estaba muy compartimentado, por lo que podrían surgir desajustes entre las diferentes iniciativas en el seno de la Unión. Así mismo, con esta política se facilita la visibilidad de la mar como espacio de interés común con gran impacto e importancia en la UE, pues las economías relacionadas con la mar aportan el 40% del PIB europeo.
Las políticas que forman parte de esta PMI son muy diversas. La Dirección General de Asuntos Marítimos y de Pesca de la Unión Europea es la principal encargada de hacer su seguimiento. Al mismo tiempo, otras direcciones generales tienen políticas relacionadas con la economía azul y con igual enfoque: Movilidad y Transportes, Empresa e Industria, Medio Ambiente, Migración e Interior o Empleo. Además, también comprenden iniciativas de política exterior del Servicio Europeo de Acción Exterior relativas a la seguridad y defensa, como la operación de lucha contra la piratería (EUNAVFOR ATALANTA)
Logros de la PMI
Los logros alcanzados por la PMI se pueden dividir en cinco grandes ámbitos: crecimiento azul, datos y conocimientos sobre el medio marino, ordenación del espacio marítimo, vigilancia marítima integrada y estrategias de cuencas marítimas.
El crecimiento azul es una estrategia adoptada por la Comisión en 2012 para fomentar el desarrollo de una economía azul de una forma sostenible. Entre sus iniciativas más destacadas, están las directrices estratégicas para el desarrollo sostenible de la acuicultura de la UE, la estrategia europea para un mayor crecimiento y empleo en el turismo costero y marítimo, así como el establecimiento del «foro de energía oceánica».
Por otro lado, los datos y conocimientos sobre el medio marino repercuten directamente en el desarrollo de las actividades marítimas y en su mejora y evolución para que sean sostenibles. Todos los avances en este sentido han estado dirigidos a conseguir una mejor recopilación y reunión de datos de forma coordinada, y culminaron con la adopción de la estrategia sobre el conocimiento del medio marino 2020.
La competencia por el espacio marítimo ha ido aumentando al mismo tiempo que las actividades que en él se desarrollan: entre otras, pesca, plantas de energía renovables o tráfico marítimo. Por esta razón, la ordenación del espacio marítimo cobra especial importancia, así como la mejora de la gestión de los conflictos y la búsqueda de las posibles sinergias que puedan surgir. Por todo ello, el Parlamento Europeo y el Consejo adoptaron la Directiva 2014/89 de la UE, que establece un marco para la ordenación del espacio marítimo.
Asimismo, todas las actividades que abarca la economía azul necesitan para su desarrollo un entorno protegido y seguro. Con el objetivo de mejorar la seguridad en el espacio marítimo nació la vigilancia marítima integrada. A través de diferentes mecanismos, los Estados miembros comparten información y datos relacionados con el control de las fronteras, la contaminación marítima, el control de la pesca, las actividades ilícitas o la defensa. En este ámbito, hay varias iniciativas relacionadas con este ámbito, la última de ellas es la «Estrategia de seguridad marítima de la Unión Europea».
Por último, las estrategias de cuencas marítimas tienen en cuenta diferentes aspectos —económicos, sociales, medioambientales o de seguridad, además de las circunstancias de los países ribereños— de áreas específicas de la UE para el mejor desarrollo de la economía azul de estas regiones. Entre otros ejemplos, destacan las estrategias para el Báltico o las regiones ultraperiféricas de la Unión.
La necesidad de coordinar la seguridad marítima en la UE
En el espacio marítimo se desarrollan actividades muy diversas que tienen repercusión en la seguridad nacional; por ello, su gestión es de vital importancia no sólo para nuestra seguridad, sino también para el desarrollo económico y social de España. Todas estas actividades deben estar coordinadas en el seno de la UE mediante la política marítima integrada.
La PMI es una política abierta, que ha evolucionado desde su nacimiento en 2007. Además, abarca aspectos como el desarrollo de la economía basada en la mar, la seguridad marítima o la ordenación del espacio marítimo. Así mismo, esta política trata de coordinar las iniciativas propuestas en el seno de la Unión para garantizar que se trabaje a partir de una concepción holística de la seguridad y preservación de nuestros mares.