12/03/2018
3 min lecturaEn la reciente reunión mantenida el 6 de marzo de 2018, el Consejo de la Unión Europea ha aprobado un programa para la aplicación de la Cooperación Estructurada Permanente (PESCO). Este programa proporciona dirección y orientaciones estratégicas acerca de cómo estructurar los futuros trabajos sobre los procesos y la gobernanza, en particular por lo que respecta a los proyectos y a las etapas del cumplimiento de los compromisos. El Consejo, a través de este programa:
España participará en 11 proyectos y liderará el destinado a mejorar la capacidad de mando y control en las operaciones y misiones de la Política de Seguridad y Defensa de la UE.
Los 25 Estados miembros que participan en la CEP son: Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chipre, Croacia, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, los Países Bajos, Polonia, Portugal, la República Checa, Rumanía y Suecia.
El 13 de noviembre de 2017, los ministros de 23 Estados miembros firmaron una notificación conjunta sobre la cooperación estructurada permanente y se la entregaron a la Alta Representante y al Consejo. El 7 de diciembre de 2017, Irlanda y Portugal notificaron también su decisión de participar en la cooperación estructurada permanente. El 11 de diciembre de 2017, el Consejo adoptaba una Decisión por la que se establece la cooperación estructurada permanente.
La Decisión del Consejo por la que se establece la cooperación estructurada permanente define:
la lista de Estados miembros participantes,
la lista de compromisos comunes ambiciosos y más vinculantes contraídos por los Estados miembros participantes, en particular el “aumento constante de los presupuestos de defensa en términos reales para alcanzar los objetivos acordados”,
la gobernanza de la cooperación estructurada permanente, con un nivel general que permita mantener la coherencia y la ambición de la cooperación estructurada permanente,
y las disposiciones administrativas, entre ellas las funciones de secretaría para la cooperación estructurada permanente en el nivel de los proyectos y la financiación.
El Tratado de Lisboa instauró la cooperación estructurada permanente en el ámbito de la política de seguridad y de defensa, al contemplar la posibilidad de que varios Estados miembros de la UE colaboren más estrechamente en el ámbito de la seguridad y la defensa. Este marco permanente para la cooperación en materia de defensa permitirá que los Estados miembros que lo deseen y puedan hacerlo desarrollen conjuntamente capacidades de defensa, inviertan en proyectos compartidos y mejoren la contribución y la disponibilidad operativa de sus fuerzas armadas.
España ha sido uno de los cuatro países impulsores de la Política Europea de Seguridad y Defensa, junto a Alemania, Francia e Italia. Además, participa en todas las misiones de la UE y es el principal contribuyente a las operaciones con 846 efectivos.
Fuente: Unión Europea, Ministerio de Defensa.