El pasado 28 de agosto de 2017 ha tenido lugar la Cumbre de París, en la que se reunieron los jefes de Estado o de Gobierno de cuatro Estados miembros (Alemania, España, Francia e Italia) así como de Chad, Libia, Níger y la Alta Representante de Política Exterior de la Unión Europea, para tratar diferentes asuntos relacionados con la inmigración irregular y la lucha contra el terrorismo. Esta reunión dio continuidad a la
Cumbre de Versalles, celebrada el pasado 6 de marzo.
Durante la comparecencia posterior de los mandatarios ante los medios de comunicación, el presidente del Gobierno agradeció la solidaridad internacional mostrada con España tras los atentados de Barcelona y Cambrils, que afectaron a ciudadanos de más de 30 nacionalidades.
En lo que respecta a la lucha contra el terrorismo, el presidente del Gobierno apostó reforzar la cooperación entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado con sus homólogos, subrayando la colaboración prestada por Francia y Marruecos.
Asimismo, durante la reunión que celebrarán próximamente los ministros del Interior del denominado G-6 (formado por Alemania, España, Francia, Italia, Polonia y el Reino Unido), España va a plantear un encuentro de los jefes de inteligencia y responsables de la lucha antiterrorista de los países europeos, con la finalidad luchar contra el terrorismo, su financiación y las prácticas de radicalización en internet y en otros ámbitos.
Además, en el ámbito de la atención y reconocimiento a las víctimas del terrorismo, el presidente del Gobierno recordó que España está promoviendo la elaboración de un estatuto internacional de las víctimas del terrorismo en la Carta Europea de Derechos de las Víctimas, lo que “emite un mensaje de fuerte compromiso con los principios de memoria, dignidad y justicia”.
En lo que respecta a la lucha contra la inmigración irregular, se enumeraron una serie de objetivos en este ámbito: evitar la pérdida de vidas en las travesías, combatir y acabar con las mafias que trafican con personas y apoyan a los grupos terroristas, reforzar las iniciativas que contribuyan al desarrollo de los países de origen, así como reforzar la cooperación en materia de control de fronteras, costas y fortalecimiento de capacidades.
Finalmente, se acordó la creación de una unidad operativa o “task force” para realizar un seguimiento de las medidas adoptadas en materia migratoria, cuyos resultados serán evaluados en una próxima reunión con un formato similar a la desarrollada en París, que se celebrará en Madrid a finales de octubre o principios de noviembre. Este encuentro servirá para preparar la Cumbre entre la Unión Europea y África que tendrá lugar los días 29 y 30 de noviembre en Costa de Marfil.
