Los días 30 y 31 de mayo de 2016 ha tenido lugar en Alicante la primera Conferencia Internacional de Diplomacia en el Mediterráneo, organizada por el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación junto con Casa Mediterráneo. A ella han acudido representantes de países del Mediterráneo, Naciones Unidas, UNESCO, la Unión Europea y de otras organizaciones regionales así como expertos en la materia.
La prevención de los conflictos ha adquirido una especial relevancia en el seno de las políticas exteriores en los últimos años, y en ellas, la diplomacia preventiva se ha identificado como un instrumento valioso para anticipar una solución a conflictos potenciales. En esta línea, el Secretario General de Naciones Unidas presentó en octubre de 2015 el informe titulado Las Naciones Unidas y la prevención de conflictos: un nuevo compromiso colectivo.
El Mediterráneo es un escenario propicio en el que poder enmarcar el desarrollo de la diplomacia preventiva, dado que es lugar de encuentro, y también de riesgos y amenazas y en el que tienen lugar dramas humanitarios como los derivados de la crisis de refugiados. Las guerras y otros conflictos armados deben poder ser prevenidos o frenados a través de la voluntad humana.
España ha situado la diplomacia preventiva en un lugar central en su política exterior, como lo demuestra, entre otros, la organización de esta primera conferencia Internacional de Diplomacia Preventiva en el Mediterráneo.
En su inauguración, el Ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, subrayó dos elementos esenciales de la diplomacia preventiva. En primer lugar, la necesidad de pasar de una cultura de reacción a una cultura de prevención, especialmente en el Mediterráneo. Los cambios habidos en regiones del Norte de África y Oriente medio demandan más estabilidad, democracia y desarrollo, y para ello el ministro García-Margallo ha expresado que es necesario afianzar el uso de distintas herramientas para la prevención de conflictos en conjunción con la comunidad internacional.
En segundo lugar, los actores locales han de estar involucrados. En esta línea, el diálogo intercultural e interreligioso es un factor beneficioso en la prevención de conflictos, para lo que también es necesario reforzar instituciones culturales y religiosas.
El ministro también expuso una seria de propuestas, como la posibilidad de utilizar las Embajadas en regiones con riesgo de conflicto a modo de una red de antenas de alerta temprana. En relación a los Derechos Humanos, España, junto a Italia, ha promovido la creación de un Fondo Especial para la protección del patrimonio cultural en zonas en conflicto. Por otra parte, nuestro país está promoviendo el establecimiento de una red global de puntos focales sobre Mujer, Paz y Seguridad. En materia de extremismo violento, propone la creación de un Tribunal Internacional contra el terrorismo y el nombramiento de un representante de alto nivel del Secretario General de Naciones Unidas para la prevención del Extremismo Violento. Otra propuesta española consiste en el nombramiento por el Secretario General de Naciones Unidas de un Representante Especial para la Libertad de Prensa. Estas dos últimas propuestas fueron objeto de apoyo por Irina Bokova, candidata al puesto de Secretaria General de Naciones Unidas, tema que también fue tratado por ambos.
Finalmente, España, como copatrocinador de la Alianza de Civilizaciones de Naciones Unidas, mantiene como propuestas la creación de un Comité para la Tolerancia y Mensajes Positivos en Internet, la elaboración de una Guía de Buenas Prácticas en Educación y Diversidad para la Integración Social y el establecimiento de una Plataforma de Líderes Religiosos por la Paz.
A lo largo del desarrollo de la conferencia, los participantes expusieron sus aportaciones en los siguientes paneles:
- Diplomacia preventiva en el Mediterráneo: vías para reforzarla
- Promoción de los Derechos Humanos como herramienta para la prevención del conflicto
- Agenda “Mujer, Paz y Seguridad” en el Mediterráneo
- Papel de la sociedad civil en la prevención de conflictos: ONG y medios de comunicación
- Diálogo político y apoyo para la gobernanza democrática como mecanismo de prevención de conflictos en el Mediterráneo
- Diálogo intercultural e interreligioso en el Mediterráneo
Los resultados de las distintas aportaciones se distribuirán a Naciones Unidas y organizaciones regionales en aras a fortalecer su papel preventivo. Este tipo de diplomacia está ocupando cada vez más un lugar central en las políticas de asuntos de exterior y con este foro España ha contribuido a estudiarla desde un enfoque integral.
