El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) ha aprobado por unanimidad la Resolución 2325 (2016), que establece las bases para que en los próximos años la comunidad internacional pueda hacer frente a la amenaza derivada del eventual uso de armas nucleares, químicas y biológicas por terroristas u otros actores no estatales.
La adopción de esta resolución tuvo lugar el día 15 de diciembre, tras un debate de alto nivel presidido por el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Alfonso Dastis.
Su contenido reafirma el compromiso de la comunidad internacional con la no proliferación de armas de destrucción masiva, estableciendo medidas novedosas. En concreto, se pide a los Estados y al Comité 1540 que se centren en los sectores y regiones que necesitan más atención, y tengan en cuenta los nuevos riesgos de la proliferación.
Además, se mejora la asistencia a los Estados que lo soliciten para luchar contra la proliferación, y se estrecha la coordinación entre el Consejo de Seguridad y las organizaciones internacionales. Se impulsa la transparencia en los trabajos del Consejo de Seguridad en este ámbito y se reconoce el papel de los parlamentarios y de la sociedad civil en la lucha contra la proliferación.
Al igual que la aprobada el pasado día 12, sobre cooperación judicial internacional en la lucha contra el terrorismo, esta resolución es otra de las iniciativas que España ha programado para este mes de diciembre, durante el que ostentará la presidencia de turno del Consejo de Seguridad.
El próximo día 20, será objeto de un debate de alto nivel en esta institución la lucha contra la trata de personas en situaciones de conflicto desde sus diferentes perspectivas, en particular la perpetrada por grupos terroristas que la utilizan de manera sistemática, recurriendo a la violencia sexual contra mujeres y niñas.
España y su compromiso con la no proliferación
La proliferación de armas de destrucción masiva, ya sean nucleares, biológicas o químicas, así como sus vectores de lanzamiento, constituyen una amenaza de suma preocupación para la comunidad internacional y también para nuestro país. La Estrategia de Seguridad Nacional recoge la no proliferación como uno de los doce riesgos principales para la Seguridad Nacional.
Entre las actuaciones más destacadas en este ámbito cabe destacar la aprobación por el Consejo de Seguridad Nacional del Plan de Acción Nacional para el cumplimiento de la Resolución 1540(2004) del CSNU, en su reunión de abril de 2015. En este Plan se definen las medidas necesarias para alcanzar la plena aplicación de la Resolución 1540, respondiendo a las necesidades de Seguridad Nacional en este ámbito.
Con el impulso de la Resolución 2325 se culmina la tarea desempeñada por España en materia de no proliferación, desde que en 2015 iniciase su membresía no permanente en el CSNU.
Durante el bienio 2015-2016 España ha liderado en esta institución internacional los esfuerzos para combatir la proliferación, y ha asumido la responsabilidad, sin precedentes, de presidir los tres Comités del Consejo relativos a la no proliferación de armas de destrucción masiva:
- Comité 1540, sobre armas de destrucción masiva por actores no estatales.
- Comité 1718 sobre sanciones a la República Popular Democrática de Corea,
- y la Facilitación del Acuerdo nuclear con Irán, plasmado en la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad de la ONU.
