El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) ha nombrado a España ”facilitadora” de las funciones que la Resolución 2231 (2015) del Consejo de Seguridad de la ONU encomienda al Consejo en relación con el cumplimiento y verificación de los compromisos de Irán sobre su programa nuclear, y ello después de que el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) informase el pasado fin de semana sobre la verificación de su carácter civil.
En esa nueva responsabilidad, España coordinará los trabajos del Consejo de Seguridad en la materia. El Gobierno español ha manifestado su agradecimiento a la confianza depositada por los miembros del Consejo como reconocimiento de la fiabilidad y de la labor de nuestro país al frente del Comité de sanciones sobre Irán (Comité 1737 del Consejo de Seguridad) y asume con determinación la responsabilidad conferida.
El pasado día 16 de enero, el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) presentó el informe final que verifica que el gobierno iraní ha cumplido con los compromisos adquiridos para reconducir su programa nuclear según lo acordado en el Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), ratificado el pasado 14 de julio de 2015 por el denominado “Grupo 5+1” (China, Francia, Rusia, Estados Unidos, Reino Unido y Alemania).
Tras recibir este informe, el CSNU ha suspendido la mayoría de las sanciones impuestas al Gobierno iraní relativas a sus actividades nucleares, entrando en vigor algunas disposiciones específicas de la resolución 2231 (2015) sobre implementación del PAIC. Sin embargo, otras medidas dispuestas en ella, como el embargo de armamento y misiles balísticos, se mantienen.
En la misma línea, la UE y EE.UU han confirmado el levantamiento formal de las sanciones económicas y financieras al Gobierno iraní por su programa de proliferación nuclear poniendo fin, entre otras, a la prohibición de importar y transportar petróleo iraní, productos petroleros y gas o la inversión en los sectores del crudo y gas, así como la reanudación de actividad bancarias con el Banco Central de Irán. Se mantendrán, no obstante, las sanciones impuestas a Irán relativas al apoyo al terrorismo o los abusos contra los derechos humanos.
La no proliferación de armas de destrucción masiva en la estrategia de seguridad nacional
La Estrategia de Seguridad Nacional se refiere a la proliferación de armas de destrucción masiva (nucleares, químicas o biológicas), así como sus sistemas de lanzamiento, como una grave amenaza para la paz y seguridad internacionales, y fija como objetivo estratégico para España el desarrollo de acciones dirigidas a impedir la proliferación, evitar el acceso a sustancias peligrosas por parte de terroristas o criminales y proteger a la población.
Concretamente, una de las siete líneas de acción estratégica establecidas es el fortalecimiento del sistema internacional de no proliferación mediante la aplicación plena de los tratados e instrumentos internacionales, entre ellos las Resoluciones del CSNU. Cabe destacar en este sentido el patrocinio de España de la Resolución 1540 (2004), en la que se afirma que la proliferación de las armas nucleares, químicas y biológicas, así como sus sistemas vectores, constituye una amenaza a la paz y la seguridad internacionales.
La Resolución 1540 obliga a los Estados, entre otras cosas, a abstenerse de suministrar cualquier tipo de apoyo a los agentes no estatales que traten de desarrollar, adquirir, fabricar, poseer, transportar, transferir o emplear armas nucleares, químicas o biológicas y sus sistemas vectores. El pasado abril el Consejo de Seguridad Nacional, principal órgano de apoyo del Presidente del Gobierno en materia de Seguridad Nacional, dio su conformidad al Plan de Acción Nacional 1540, elaborado por el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, en coordinación con todos los Ministerios y Unidades competentes en la materia.
Además de lo anterior, en 2015 y 2016 -bienio durante el que forma parte del CSNU como miembro no permanente- España preside el Comité 1540, siendo éste uno de los Comités más importantes del Consejo de Seguridad y un componente fundamental de la estructura mundial de seguridad.
La presidencia española del Comité 1540 se suma a otras dos presidencias de órganos del Consejo de Seguridad que España ha venido ostentando, también relacionados con la no proliferación de armas de destrucción masiva: el Comité 1718, relativo al régimen de sanciones a la República Popular Democrática de Corea y el Comité 1737, relativo al régimen de sanciones a Irán, que se encuentra en fase de disolución. A todo ello se incorporaría la nueva responsabilidad conferida como facilitadora del cumplimiento de los compromisos de Irán sobre el desarrollo de su programa nuclear.