Resultados de la Cumbre de la OTAN en Madrid

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Resultados de la Cumbre de la OTAN en Madrid 
01 de julio 2022
 

 

Madrid ha sido escenario de uno de los eventos de mayor relevancia internacional: la Cumbre de la OTAN. Del 28 al 30 de junio, la capital de España ha sido la sede de las reuniones de las más de 5.000 personas que han conformado las delegaciones de sus 30 Estados de la Alianza Atlántica, así como de otros países socios e invitados a participar en una cumbre que muchos ya califican de histórica, por la organización, por los acuerdos alcanzados —especialmente, la promulgación de un nuevo Concepto Estratégico— y, también, por el inicio del proceso de adhesión de Finlandia y Suecia. Y todo ello en el marco de una guerra abierta en las puertas de Europa, provocada por la invasión rusa de Ucrania.

En este contexto, la declaración oficial de la Cumbre de Madrid destaca la naturaleza defensiva de la OTAN y la importancia de mantener la unidad y la firmeza en tiempos calificados como “críticos” para la seguridad, en un escenario internacional de alta competición geopolítica.

 

 

NUEVO CONCEPTO ESTRATÉGICO DE LA OTAN

En la Cumbre de Madrid, la OTAN ha endosado su nuevo Concepto Estratégico, un documento marco que reafirma los valores y el propósito de la Alianza Atlántica, diagnostica el contexto estratégico y establece la línea de trabajo para los próximos años. El nuevo texto introduce significativas novedades con respecto a su predecesor, aprobado en la cumbre de Lisboa de 2010.

 

Actualización del contexto estratégico de seguridad

En primer lugar, con respecto al entorno de seguridad internacional, en 2010 se destacaba que «el área euroatlántica está en paz, y la amenaza de un ataque convencional en el territorio de la OTAN es baja». Por el contrario, el Concepto de Madrid de 2022 subraya que «el área euroatlántica no está en paz. No podemos descartar un ataque contra la soberanía y la integridad territorial de los aliados».

Además, el nuevo Concepto Estratégico endurece el discurso y dibuja un contexto de seguridad deteriorado, donde la invasión de Ucrania por parte de la Federación Rusa está presente desde el arranque de este documento. En la actualidad, el diagnóstico señala una mayor competición estratégica, con alusión a acciones maliciosas en el ciberespacio y espacio ultraterrestre, campañas de desinformación, instrumentalización de la migración, manipulación de los suministros de energía, coerción económica e interferencias en nuestros procesos democráticos e instituciones a través de tácticas híbridas.

En cuanto a Rusia, el nuevo Concepto subraya que constituye la amenaza más importante y directa a la seguridad de los Aliados, así como a la paz y estabilidad en el área euroatlántica. Como tal, Rusia no puede ser considerado un país compañero, aunque la Alianza está predispuesta a mantener canales de comunicación abiertos para gestionar y mitigar riesgos, prevenir una escalada y aumentar la transparencia en las relaciones políticas y diplomáticas.

Con relación a China, este país no aparecía en el documento estratégico del 2010, pero el nuevo texto sí le dedica especial atención. Así, se destaca que las ambiciones y políticas coercitivas del gigante asiático suponen un desafío para nuestros intereses, nuestra seguridad y nuestros valores.  Entre los instrumentos que utiliza para su proyección de poder, se incluyen —entre otros— la expansión militar, las operaciones híbridas, las campañas de desinformación o el control de sectores claves tecnológicos e industriales. Además, su creciente partenariado estratégico constituye otro elemento que pretende socavar el orden internacional. Sin embargo, la OTAN se mantiene abierta a mantener una relación constructiva con China, que permita salvaguardar los intereses de seguridad de la Alianza.

Tareas centrales de la OTAN

Por otro lado, el Concepto Estratégico de Madrid actualiza la denominación de las tareas centrales de la OTAN para enfatizar más la disuasión y la prevención. Mientras que en 2010 se hacía referencia a «la defensa colectiva, la gestión de crisis y la seguridad cooperativa», en esta ocasión se emplea un léxico diferente para centrarse en «la disuasión y la defensa, la prevención y la gestión de crisis, y la seguridad colectiva». 

En el primer bloque, se hace referencia a la prevalencia de la disuasión y defensa que impidan la posibilidad de agresión por parte de cualquier potencial adversario. Además, aparece la transformación digital y la mejora de las capacidades en el ciberespacio y en el espacio ultraterrestre, que se constituyen en áreas clave para hacer frente a un panorama donde predominan las campañas híbridas.

Dentro del segundo bloque, la componente preventiva en materia de gestión de crisis hace referencia a la conducción de ejercicios periódicos, a la preparación y mejora de capacidades civiles y militares y de planeamiento y coordinación y, por último, al apoyo a socios. Además, incluye la contribución a la mejora de las capacidades de la OTAN en la lucha contra el terrorismo y otros desafíos de seguridad.
En tercer lugar, en materia de seguridad cooperativa, destacan la Política de Puertas Abiertas de la OTAN como expresión de sus valores fundamentales y la cooperación UE-OTAN, además de los partenariados con países y organizaciones en áreas de interés estratégico para la Alianza. Además, la OTAN aspira a ser la organización líder a nivel mundial en materia de seguridad y cambio climático, que están estrechamente interrelacionados.

Garantía de la soberanía y la integridad territorial

La OTAN es una Alianza de naturaleza defensiva, y así lo enfatiza el artículo 20 del Concepto de Madrid: «nadie debe dudar de nuestra fuerza y determinación para defender cada pulgada de territorio aliado, preservar la soberanía y la integridad territorial integridad de todos los Aliados y prevalecer contra cualquier agresor». Esta visión gravita sobre el Artículo V del Tratado de Washington y en los valores comunes de la Alianza: la libertad individual, los derechos humanos, la democracia y el derecho internacional.

En este sentido, cabe señalar como una de las importantes novedades la inclusión de nuevas situaciones que pueden justificar para invocar el Artículo V del Tratado de la Alianza, que no estaban contempladas en el texto anterior.  Estas son una acción o un conjunto de acciones maliciosas en el ciberespacio; operaciones hostiles hacia, desde o en el espacio ultraterrestre que sean consideradas como ataque armado, así como operaciones híbridas contra los aliados que alcancen el nivel de un ataque armado.
  
Al respecto de estas operaciones híbridas, el nuevo Concepto Estratégico OTAN de 2022 las relaciona con actores autoritarios, la Federación Rusa, la República Popular China y proxies. En cuanto a su definición, el documento señala que son aquellas que incluyen actividades maliciosas en el ciberespacio y el espacio ultraterrestre, campañas de desinformación, injerencia extranjera en procesos e instituciones democráticas, manipulación del suministro de energía, coerción económica e instrumentación de la migración.

Visión 360º de la seguridad y arco Sur

Otro aspecto transcendental del nuevo Concepto es su firme aproximación global de 360º a la seguridad.

En este sentido, el vecindario Sur de la OTAN afronta desafíos interconectados de seguridad —demográficos, políticos, económicos—, que se ven agravados por el impacto del cambio climático, las instituciones débiles, emergencias sanitarias e inseguridad alimentaria. En este contexto, Oriente Medio, el norte de África y el Sahel aparecen como regiones de interés que afectan directamente a la seguridad de los aliados y sus socios.

ADHESIÓN DE FINLANDIA Y SUECIA

En la Cumbre de Madrid, se ha adoptado la decisión histórica de invitar formalmente a Finlandia y Suecia a adherirse a la OTAN como país miembro. Una vez que esta nueva ampliación sea efectiva, la OTAN pasará a contar con 32 Estados miembros. De los 27 países que forman parte de la Unión Europea, 23 serán a su vez miembros de la Alianza Atlántica: unas cifras que revelan la trascendencia de la cooperación en materia de seguridad entre las dos organizaciones.
 
UNA CUMBRE DE DIMENSIÓN GLOBAL

Además de los miembros de la OTAN, en la Cumbre de 2022 han participado la Unión Europea, países socios y otros Estados invitados.

En este ámbito, hay que destacar la participación —por videoconferencia— del presidente de Ucrania el primer día de la Cumbre. Por otro lado, y además de los dirigentes de Finlandia y Suecia, también fueron invitados la presidenta de la Comisión Europea y el presidente del Consejo Europeo, así como el primer ministro de Georgia.

Asimismo, la agenda de la Cumbre también incluyó la primera reunión oficial OTAN sobre el indo-pacífico, con la participación de los máximos mandatarios de Australia, Japón, Nueva Zelanda y Corea del Sur, ya que todos estos países comparten una visión común de los desafíos globales a la seguridad.

Además, participaron en la Cumbre los ministros de Asuntos Exteriores de Jordania y Mauritania, así como el Ministro de Defensa de Bosnia y Herzegovina.
 
NUEVAS TECNOLOGÍAS: FONDO DE INNOVACIÓN DE LA OTAN

Durante la Cumbre, España se ha adherido a este nuevo fondo multinacional de innovación de la OTAN, que está dotado con un presupuesto de mil millones de euros para los próximos quince años, computados a partir de febrero de 2023.  Este Fondo de Innovación de la OTAN servirá para financiar iniciativas relacionadas con tecnologías de doble uso civil-militar. En este marco, se incluirá el nuevo acelerador tecnológico de la OTAN aprobado en abril de este año, denominado DIANA (Defence Innovation Accelerator for the North Atlantic).

MAYOR PROTAGONISMO DE ESPAÑA EN LA OTAN

La Estrategia de Seguridad Nacional 2021 aboga por la participación y un mayor protagonismo de España en la OTAN. Además de ser el país anfitrión de la cumbre anual de la Alianza Atlántica, España siempre ha demostrado su firme compromiso con la Alianza a través —entre otros factores— de su contribución tanto a las estructuras de mando de la Alianza como los despliegues en las operaciones en el exterior, que se verán reforzadas a corto plazo.

Actualmente, España contribuye con el despliegue de efectivos en Letonia dentro de la misión Enhanced Foward Presence. En esta misión, el contingente español ha aumentado en un 40%, y ya supera los 600 efectivos, con 129 carros de combate y una batería de misiles de defensa tierra-aire NASAMS). Además, España aporta destacamentos aéreos en Bulgaria (cuatro Eurofighters), y en Lituania (ocho F-18).  Asimismo, en agosto se incorporarán cuatro cazas Eurofighter españoles a Estonia. Por último, también España contribuye con batería de misiles Patriot en Turquía, con 149 militares españoles a la misión de asesoramiento en Irak, y con la participación en los Standing NATO Maritime Groups, donde se integran tres buques de la Armada.
 
CONCLUSIONES: UNA ESPAÑA PLENAMENTE COMPROMETIDA CON UNA OTAN MÁS FUERTE

Entre los principales resultados de la Cumbre se encuentran la adopción de un nuevo Contexto Estratégico de la OTAN; el acuerdo sobre la accesión de Finlandia y Suecia como próximos miembros; y el incremento de la ayuda a Ucrania a través del envío de material no letal de defensa o el apoyo a la reconstrucción del país. Además, destaca la firma de la carta de compromiso con el Fondo de Innovación, una cuestión que contribuirá al desarrollo de soluciones tecnológicas avanzadas mediante la cooperación con el sector científico y la industria tecnológica. Asimismo, la reunión con países socios de la Alianza del área indo-pacífica ha sido de gran significancia, pues es la primera vez que se incluye una iniciativa en una Cumbre OTAN de estas características, que tiene centrado el foco en un área geográfica de cada vez mayor importancia estratégica. Por último, la conexión de la seguridad con los efectos del cambio climático, junto con la Agenda Mujer, Paz y Seguridad, han sido dos asuntos tratados en las sesiones de trabajo en la Cumbre de Madrid.

Por otro lado, el nivel de ambición de la OTAN también se ha visto mejorado, mediante el establecimiento en la Cumbre de una nueva postura de disuasión y defensa a largo plazo. Como consecuencia, el despliegue de fuerzas operativas en el flanco oriental se verá reforzado desde la actual configuración basadas en grupos de combate hacia unidades de entidad brigada.

En la nueva aproximación de la OTAN, basada en una visión de la seguridad 360, el terrorismo internacional también aparece entre sus principales preocupaciones. De forma paralela, igualmente se ha avanzado en materia de financiación común de la OTAN, en el marco de una visión compartida que considera necesario un aumento en la inversión en Defensa para hacer frente a un escenario de seguridad cada más complejo.

Con todo, se puede concluir que la OTAN sale reforzada de la Cumbre de Madrid, que constituye un evento de importancia histórica para España, no solo por haber sido el país anfitrión de este trascendental encuentro internacional, sino porque ha demostrado, una vez más,  su firme compromiso con la Alianza Atlántica en aras de la defensa del Estado y su población, así como en la consecución de un mundo más estable y pacífico.
 

 
 
Seguridad Nacional un proyecto compartido