Día Internacional contra los Ensayos Nucleares
29 de agosto 2021
Cada 29 de agosto se celebra el Día Internacional contra los Ensayos Nucleares, una conmemoración que fue aprobada por unanimidad —mediante Resolución 64/35— en la Asamblea General de Naciones Unidas el 2 de diciembre de 2009. Esta iniciativa fue propuesta por la República de Kazajstán, y la fecha conmemora el cierre de su polígono de ensayos nucleares en Semipalátinsk, que se había producido ese mismo día en 1991. La Resolución invita a los Estados Miembros, al sistema de las Naciones Unidas, a la sociedad civil, a las instituciones académicas, a los medios de difusión y, por último, a todas las personas a celebrar este día; entre otros eventos, por medio de actividades educativas y de concienciación.
La prohibición de llevar a cabo ensayos nucleares es uno de los elementos fundamentales de Régimen de No Proliferación, cuya finalidad es evitar la diseminación a nivel mundial de las armas de destrucción masiva. Sin duda, la No Proliferación de armas nucleares constituye una de las máximas preocupaciones de la comunidad Internacional desde el inicio de la era nuclear en 1945, cuando Estados Unidos lanzó sobre Hiroshima y Nagasaki en Japón —el 6 y el 9 de agosto, respectivamente— las dos primeras bombas nucleares. Un ataque nuclear —hasta la fecha, el único de la historia— en el que murieron entre 120.000 y 150.000 personas y más de 130.000 resultaron heridas.
El término “no-proliferación nuclear” comenzó a utilizarse en 1961 por parte de Estados Unidos, aunque hasta 1965 no apareció en los borradores de lo que finalmente sería el Tratado de no-proliferación de armas nucleares (TNP). Fue entonces cuando la adopción de un tratado que prohibiera las pruebas nucleares quedó recogida entre los aspectos básicos de lo que debía contemplar el término no-proliferación nuclear. Así, en enero de 1994, se iniciaron conversaciones sobre el después denominado “Tratado de Prohibición Completa de Ensayos Nucleares” (TPCEN) del que, en junio de 1996 y tras más de dos años de intensas negociaciones, se presentó un proyecto final. Finalmente, el 24 de septiembre de 1996 se abrió para su firma en Nueva York, 71 estados firmaron inicialmente el Tratado, y entre ellos cinco de los ocho que disponían de capacidad nuclear. Actualmente, 185 países —de un total de 196— han firmado el TPCEN; mientras que 170 lo han ratificado.
No obstante, los desafíos persisten, pues el TPCEN no ha entrado todavía en vigor porque aún no ha sido ratificado —condición imprescindible— por aquellos Estados que poseen capacidades nucleares importantes: los Estados Unidos y la República Popular de China; y tampoco por los cuatro estados nucleares que se encuentran fuera del TNP: India, Pakistán, Israel y Corea del Norte. Por ello, la organización encargada de la promoción del TPCEN, así como de la creación del régimen de verificación para que sea operativo cuando entre en vigor, se denomina Comisión Preparatoria de la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (CTBTO), fundada en 1996 y con su sede en Viena.
Desde la aparición del arma nuclear, el número de ensayos ha sido muy elevado, como también el daño que han producido. Desde 1945 hasta la apertura a la firma del TPCE en 1996, se llevaron a cabo más de 2.000 ensayos nucleares en todo el mundo:
- Estados Unidos realizó 1.032 pruebas entre 1945 y 1992.
- La Unión Soviética llevó a cabo 715 pruebas entre 1949 y 1990.
- El Reino Unido llevó a cabo 45 pruebas entre 1952 y 1991.
- Francia llevó a cabo 210 pruebas entre 1960 y 1996.
- China llevó a cabo 45 pruebas entre 1964 y 1996.
Desde 1996, y aunque los ensayos nucleares se han reducido de forma drástica gracias al TPCE, todavía se realizaron otros diez ensayos nucleares:
- La India llevó a cabo dos pruebas en 1998.
- Pakistán realizó dos pruebas en 1998.
- La República Popular Democrática de Corea anunció que realizó un ensayo nuclear en 2006, 2009 y 2013, dos en 2016 y uno en 2017.
En España, el principio rector en ámbito de la no proliferación reside en el fomento de la universalidad de los tratados, convenciones y demás instrumentos internacionales, así como su aplicación en el plano nacional; y todo ello en conformidad con la estrategia de la Unión Europea contra la proliferación de armas de destrucción masiva.
En este ámbito, y como recoge la Estrategia de Acción Exterior 2021-2024 del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, la acción exterior de nuestro país «será decididamente multilateral en su orientación (…) Buscaremos y promoveremos respuestas globales a problemas globales, a través de la defensa e impulso de un multilateralismo reformado y reforzado». Y «en este contexto —señala la Estrategia—será necesario intensificar el apoyo al régimen internacional de no proliferación de armas de destrucción masiva y desarme, que atraviesa una fase de erosión sin precedentes».
Por su parte, la actual Estrategia de Seguridad Nacional (ESN2017) recoge, como una amenaza a la seguridad, el riesgo de la proliferación de armas de destrucción masiva, especialmente las nucleares y los ensayos realizados con las mismas. Así, la ESN2017 señala que «la proliferación de las armas de destrucción masiva (nucleares, químicas, radiológicas y biológicas) y sus vectores de lanzamiento (principalmente misiles) suponen una grave amenaza para la paz y seguridad internacional, y afectan directamente a la Seguridad Nacional». Por ello, entre sus líneas de acción, la ESN propone «Promover y potenciar el multilateralismo eficaz y el cumplimiento de los compromisos, normativa y organismos que conforman el régimen internacional de no proliferación de armas de destrucción masiva y vectores de lanzamiento».