La Estrategia de Seguridad Marítima Nacional de 2013, recoge en el apartado dedicado a la piratería que “parte de la flota mercante y pesquera de España transita o faena en zonas especialmente vulnerables a los actos de piratería. Por este motivo, es necesario garantizar el uso del mar con fines lícitos junto a la comunidad marítima internacional”. El 31 de marzo de 2017, España asumió el mando de la operación Atalanta de la UE en el océano Índico.
Desde el 13 de marzo se han registrado cuatro ataques, según datos de la operación Atalanta, cometidos por presuntos piratas en aguas del Golfo de Adén y el Océano Índico, tres más que en 2016, pero muy lejos de los 176 registrados en 2011 o los 34 de 2012.
En dos de los supuestos contemplados, los atacantes no sólo no consiguieron su objetivo, sino que tres presuntos piratas fueron capturados por las fuerzas internacionales.
A través de su página web (www.eunavfor.eu), la Fuerza Naval de la Unión Europea (EUNAVFOR - Somalia) recuerda a los buques civiles que operen y realicen tránsitos en la zona, la conveniencia de acogerse a las recomendaciones contempladas en el “Best Management (BMP) for protection against Somali-based-piracy”. La Estrategia de Seguridad Marítima Nacional aprobada en 2013, también recoge la importancia de este tipo de medidas a implementar por la comunidad marítima: “los códigos de conducta y buenas prácticas son clave para hacer frente a esta amenaza.”
La Unión Europea puso en marcha la operación Atalanta en diciembre de 2008 y según los términos de su mandato –extendido hasta el 31 de diciembre de 2018–, contribuye a la disuasión, prevención y represión de los actos de piratería y robo a mano armada frente a las costas de Somalia. Además, los medios de la operación, protegen también los buques del Programa Mundial de Alimentos de la ONU (PMA), que desde el comienzo de las escoltas navales a buques del PMA, han hecho llegar hasta el momento, un millón trescientas mil toneladas de ayuda humanitaria al pueblo somalí.
Por otra parte, la operación Atalanta, también proporciona protección al transporte marítimo vulnerable en la zona y contribuye a la vigilancia de las actividades pesqueras frente a las costas de Somalia.
Desde el 31 de marzo, España asume el mando de la operación, y mantiene desplegados en la zona el buque de Asalto Anfibio “Galicia” de la Armada Española y un avión de patrulla marítima del Ejército del Aire.
Fuente: Unión Europea